¿Acaso el mundo no es sino la sombra de una nube que, no bien el hambriento de sombra la anhela, se disuelve…? (Ibn al-Mu'tazz)



lunes, 4 de julio de 2011

Arba`a



Las mañanas son lo más lleno de la vida.

Lo que merece la pena no es invadir los espacios
con objetos que no hablan por sí mismos
ni azarar el tiempo con planes que no están en nuestra mano mantener.

Es la sensación del cuerpo naciente cada día
lo que otorga ocupación y sentido
lo que da capacidad y provisión
lo que toca la tierra y vuela como el aire.

Hasta el más incrédulo alza su vista sobre sí mismo
en el instante de despertar,
y sabe que el sol alivia su vida y le promete venturas
y agradece ser un día más presencia y acto.

2 comentarios:

  1. Gracias por seguirme, yo también lo hago, me gusta lo que has escrito.

    Porque a pesar de la oscuridad siempre merece la pena sentir la mañana del amanecer abrazando un día más.

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  2. Carla, bienvenida. Haz de tu blog una luz que crezca cada día. La misma que llevarás, seguro, en tu interior y que por ahora la mantienes mortecina. Esa luz está esperando que la potencies.

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